La única muestra de sabiduría

Hace un tiempo estaba leyendo un artículo que cuestionaba la sabiduría de la naturaleza y también he escuchado varias discusiones sobre el tema. En la mayoría de los casos los argumentos para defender esta supuesta sabiduría son usados de forma incorrecta. Esto funciona, por ejemplo, de la siguiente manera, se nos dice que la naturaleza en su sabiduría nos puso cejas para evitar que las gotas que bajan por la frente nos entren en los ojos, o que el pabellón auricular tiene esa forma para mejorar la llegada de los sonidos al oído; pero todo esto puede ser explicado perfectamente con una teoría evolutiva que no necesita de ninguna sabiduría por parte de la naturaleza.
Sin embargo yo me he encontrado con una verdadera prueba de la sabiduría de la naturaleza y es la pequeña concavidad que tenemos entre la nariz y el labio superior, esa especie de cuneta que separa a los bigotes. Aquí sí la naturaleza se adelantó miles de años y sin ninguna ventaja evolutiva nos puso esta concavidad, y el único motivo para que tuvo para ponerla ahí fue para que los seres humanos actuales podamos tomar del pico de una botella sin esfuerzo. Es gracias a esto que mientras el liquido sale y entra a la boca el aire puede entrar a la botella y uno no tiene que andar chupando como si fuera una mamadera.
Y si alguien tiene aún alguna duda acerca de esto que me diga para que otra cosa puede servir esta pequeña oquedad porque la verdad me gustaría poder volver a pasarme al bando de los que no creen en la sabiduría de la naturaleza.