Gustav - Otra vida desperdiciada

Tuesday, March 27, 2007

La miniserie del mes


Durante la década del 50 una extraña nave cae sobre el territorio de los Estados Unidos. Inmediatamente los militares toman el control y recuperan de la escena del accidente restos de la nave, un extraño artefacto metálico y el cuerpo de lo que parece ser un extraterrestre. Al poco tiempo el cuerpo del extraterrestre desaparece misteriosamente.
A lo largo de los años se van sucediendo diferentes militares que tienen a cargo la investigación. Dos generaciones más tarde una serie de pistas los llevan ante una enigmática niña que parece tener una sabiduría poco común para su escasa edad. Finalmente un brillante científico se une a la investigación militar y logra unir todas las piezas del rompecabezas develando el misterio.
Lo que se estrelló no fue una extraña nave sino una sonda meteorológica, el supuesto extraterrestre era un enano que venía borracho en bicicleta de una fiesta de disfraces, el extraño artefacto metálico era el freno de la bicicleta, el cuerpo no desapareció misteriosamente sino que el enano dejó embarazada a una de las enfermeras del cuartel y se rajó, y la extraña niña en realidad era la hija del enano y la enfermera, ya grande, que todos confundieron con una infante.
La última escena del último capítulo muestra las estrellas y la voz de la enana en off confirma que estaban todos equivocados.

(MISTAKEN)


Saturday, March 24, 2007

Tutorial de Paradojas (Parte I)

Tómese una reunión cualquiera en la que alguien suelte la supuesta paradoja que plantea "¿Puede Dios crear una piedra tan grande que ni él mismo pueda levantar?". Inmediatamente los ateos se apresurarán a decir que "Si no puede crearla entonces Dios no es Todopoderoso, y si puede crearla tampoco lo es puesto que no podrá levantarla". En esos momentos los católicos se retirarán indignados, y para ese entonces los agnósticos ya se habrán ido. Pero usted puede intentar desanudar la paradoja despojándose de sus creencias religiosas y exponiendo el siguiente razonamiento científico.
Digamos que Dios crea una piedra del tamaño de una montaña, aquí mismo, sobre La Tierra. No debería tener ningún problema en levantarla así va un poco más lejos. Crea una piedra del tamaño del mismo planeta Tierra. Acá las cosas se complican un poco, porque al ponerla en órbita, por ejemplo entre La Tierra y Marte, empieza a desaparecer el concepto 'arriba' y el sentido de 'levantar' empieza a ser relativo al observador. Esta piedra, eso sí, será afectada por los campos gravitatorios de todos los cuerpos celestes de una manera directamente proporcional a sus mazas e inversamente proporcional a las distancias que los separan, y sin embargo Dios no tendría ningún problema en desplazarla como se le antoje. De hecho, podría pensarse lo mismo con una piedra del tamaño de una galaxia y aún así Dios podría seguir 'levantándola' sin problemas. Es decir que Dios va a poder seguir 'levantando' la piedra siempre y cuando tenga lugar para moverla. Así que la única forma en que pueda llegar a existir una piedra tan grande que ni Dios pueda llegar a levantarla sería si este decide convertir a todo el universo en una enorme piedra que se expande a la velocidad de la luz.

Moraleja: Ojo con lo que nos planteamos, porque de haber un Dios, si un día lo agarramos medio cabreado, capaz que convierte el universo en piedra solo para que nos dejemos de molestar.


Tuesday, March 20, 2007

Dark Bug


Saturday, March 17, 2007

¿Qué gano con esto?

Todo lo que escribo en este blog esta basado en cosas que han surgido en mi vida cotidiana. Jamás me siento a pensar en lo que voy a escribir, a lo sumo pienso en cual sería la forma más divertida de contarlo o en como trasladarlo desde el contexto en el que pasó para que se pueda apreciar.
Lo que quiero decir es que este blog es una especie de proyecto de documentación de las ridiculeces de mi vida que algún retorcido mecanismo de mi mente me hace pensar que valen la pena ser documentadas. No pretendo hacerme popular, ni hacerme rico publicándolo, ni tener mil visitas por día. Lo que sí debo confesar es que disfruto de los comentarios que le dan otra vuelta de tuerca a lo que yo había puesto, los que me siguen la joda. Primero porque me divierten mucho y segundo porque me dan la esperanza de que no voy a estar tan solo en el ala psiquiátrica el día que me internen. ¿Pero por qué estoy escribiendo todo esto? Precisamente para documentarlo y no perder el rumbo; porque vean, tengo menos memoria que una vaca con arterioesclerosis.

Pero todavía queda una pregunta, ¿qué voy a ganar yo con todo esto?
Bien, probablemente lo único que gane sean más enemigos.